INSTALACIÓN DE PLANTAS SOLARES
Desde hace tiempo Denalec ofrece la inst
Instalaciones solares conectadas a red (autoconsumo)
Este tipo de instalaciones se caracterizan, como su nombre indica, por permanecer conectadas a red, un modelo de producción de distribución. Prefieren el autoconsumo con energía solar cuando pueden contar con ella, y cuando no pueden, la obtienen de la red. Lo que diferencia una instalación de otra es la gestión del excedente, es decir, qué hacemos con la energía que produce nuestra instalación y que no se consume.
Instalaciónes solares de autoconsumo acogida a compensación
Este tipo de instalación se caracteriza por el hecho de que utiliza su excedente para energía financiera excedente financiera, lo que sucede, por ejemplo, cuando no estamos presentes en el lugar de la instalación y por lo tanto no la usamos. Esta energía se inyecta a la red eléctrica y recibimos una compensación a cambio. Esta compensación puede tener tres variantes diferentes, según el país y la legislación vigente en cada país:
- Saldo de red: por cada kilovatio hora insertado en la red, el productor tiene derecho a consumir un kilovatio ingresado en la red. cuadrícula red cuando lo necesite.
- Venta a la red: recibes una determinada cantidad por cada kilovatio-hora cargado a la red.
- Precio neto (compensación): cada kilovatio-hora descargado de la red reduce la factura de la luz en una cantidad determinada.
En España desde abril de 2019 regula el autoconsumo con compensación económica hasta 2019 RD 2 /2019. Esta norma establece un sistema de compensación en forma de ahorro; se constata que el exceso de electricidad producido en aparatos de capacidad inferior a 100 kW y conectados a la red produce una compensación, que en este caso se refleja en la factura de la luz en proporción variable o similar con saldo negativo. refleja nuestro consumo. Se trata, por tanto, de un descuento en la factura de la luz, que no debe confundirse con la venta directa del excedente.
Este modelo de instalación se ha convertido en un sistema extremadamente rentable, porque los costes de material no son excesivos (paneles fotovoltaicos, estructuras, inversor, cableado, paneles de protección y contador), lo que, sumado a la compensación de excesos, permite amortizar nuestra inversión en 6 -10 años. Un sistema de ahorro muy eficiente teniendo en cuenta que los paneles pueden funcionar durante 25 años.
Instalación FV de autoconsumo con acumulación en baterías
Esta opción de autoconsumo consiste en introducir la energía sobrante en la batería que se suministra con la instalación, permitiendo que se consuma cuando no hay radiación solar. Sin embargo, seguimos conectados a la red eléctrica, de manera que cuando se agote la energía almacenada en la batería, podemos seguir consumiendo lo que hemos tomado de la red. Estas estaciones tienen una serie de ventajas, como asegurar el consumo de toda la energía que producimos y evitar pérdidas tanto en el transporte de nuestra energía como en el cobro de la red eléctrica. Sin embargo, si nos fijamos en este tipo de instalaciones, hay que tener en cuenta la inversión inicial, porque cambia significativamente las instalaciones de autoconsumo que reciben compensación. Agregar baterías al sistema requiere un aumento significativo en el precio de los materiales, y no podemos ignorar la vida útil de estos productos; por lo que tenemos que mirar con mucho cuidado las estimaciones de depreciación para asegurarnos de que valga la pena financieramente.
Instalación FV de autoconsumo sin excedentes
La característica principal de este modelo de instalación es que no realiza ninguna inyección a la red eléctrica, sino que toma energía de ella cuando es necesario. Se trata de instalaciones muy parecidas a las anteriores, con la diferencia de que añadimos a la instalación un mecanismo de protección contra salpicaduras, que se conecta directamente al inversor, de forma que no se produce más energía de la necesaria y esto evita que se transferido a . la cuadrícula . Al regalar nuestros excedentes, perdemos la oportunidad de usarlos, no para el consumo de otros, y no recibimos compensación ni retorno por la energía que produce. Este tipo de instalación es necesaria cuando la legislación vigente no permite inyectar energía a la red eléctrica.
Desconectadas de la red eléctrica
Instalación FV aislada
A diferencia de todas las anteriores, este tipo de instalación no está conectada a la red eléctrica. La electricidad producida en la planta se consume en el mismo lugar donde se encuentra el equipo, evitando así la dependencia de la red. Este tipo de instalación solar requiere de un inversor cargador y un generador para almacenar energía cuando no hay radiación solar. El diseño del proyecto de la instalación se calculó de forma que la energía generada y el volumen de almacenamiento permitan pasar unos días sin las citadas radiaciones. Esto afecta directamente al tamaño de la instalación, suponiendo que además del pack de baterías haya más placas solares que instalaciones de autoconsumo. Las instalaciones aisladas son la elección ideal para aquellas viviendas o comercios (ej. fincas) que se encuentran aislados de la red, en cuyo caso es la opción más económica y duradera. A día de hoy, si tenemos la oportunidad de consumirnos nosotros mismos, no es una opción competitiva, pero si nuestra preocupación es la rentabilidad de la instalación. En este caso, el objetivo es conseguir la autoproducción de energía donde no sea posible, de forma limpia y responsable.